Me siento observado. Los socios miran, examinan, escrutan, analizan, diseccionan, espían, desmenuzan, cada ejercicio que hago: “Siempre estás haciendo abdominales” me dice uno. No es verdad. Es que tú siempre vienes por la mañana, a la hora en la que yo suelo hacer abdominales. “Te pasas el tiempo estirando”, acusa otro. Tampoco. Es que tú vienes a última hora y me ves terminando mi entrenamiento.
También me someten a interrogatorios sobre cada cosa que como. ”¿Qué tiene tu ensalada de hoy?”, me preguntan intentando fisgar en el tupper. Canónigos, tomate, queso, huevo, maíz, guisantes y atún.”¿Qué son esas bolitas?" Cuos-cous. “Y esos círculos blancos?” Palmitos. “¿No te cansas de comer siempre ensalada?” No. Combinaciones de 7 de entre unos 15 ingredientes que me gustan dan 6435 ensaladas distintas. “¿Comes plátanos?, ¿No era que engordan?” Oye, ¡que buen tema para un blog!
Los falsos mitos respecto a los alimentos dan mucho juego. Vamos a intentar desmontar algunos.
Los plátanos.
Los plátanos son frutos muy ricos en hidratos de carbono (almidón) y apenas contienen proteínas y grasas. Tienen cantidades importantes de potasio, fundamental para prevenir las rampas musculares, y magnesio, algo de hierro, betacaroteno, las 3 vitaminas antioxidantes (A, C y E), ácido fólico, fibra y es pobre en sodio. Es un poco diurético y suavemente laxante, energético y remineralizante. Su azúcar es fructosa, como la de todas las frutas, pero contiene además glucosa, por lo que no conviene a los diabéticos.
Es uno de los frutos tiernos que proporcionan más calorías, unas 100Kc por cada 100 gramos (el peso medio de un Plátano de Canarias), que tampoco son tantas: Es mayor que las 60 calorías que nos proporcionan 100 gramos de manzana o las irrisorias 22Kc de 100 gr. de la sandía, pero a su favor el plátano cuenta con una muy superior capacidad saciante. Cualquier snack, por mas dietético que sea, tiene muchas más calorías. Consumida con moderación, es una opción muy saludable y conveniente.
Un consejito: Los plátanos no deben guardarse en la nevera porque pierden su sabor y hasta se ponen rancios.
Alimentos integrales.
“Integral” no es lo mismo que “dietético”. Una baguette integral tiene aproximadamente las mismas calorías que una fabricada con harinas refinadas. Es más sana por su alto contenido en minerales y fibras. Ayuda a eliminar toxinas, pero en absoluto adelgaza.
El pan.
Además de hidratos de carbono, aporta proteínas, vitaminas, minerales, fibra y es muy pobres en grasas. Es un alimento muy recomendable y debería tomarse en mayor cantidad, ya que en los últimos años ha disminuido su consumo. Todos los socios, que han conseguido excelentes resultados con las dietas de Aída, se sorprendieron cuando vieron pan en el menú.
Es una opción mucho más sana que los cuernitos, grisines o galletas. Estas últimas tienen muchas más calorías (unas 420Kc contra 280Kc del pan, cada 100gr.) y grasa. Hasta las aparentemente inocentes galletas de agua contienen las temidas grasas trans,
Mac ensaladas.
Cuando recibí la visita de una amiga y su hijo pequeño, que viven en Barcelona, me sugirió cenar en un Mc Donalds. ¿Estás loca?, le dije. ¿Y si me ve un socio del gym? "Venga, que le chifla el parque de bolas. Te pides una ensalada", me animó.
Una Big Mac tiene 540 calorías, 43gr. de grasa saturada y 1,040mg. de sal, mientras que la Mac ensalada Chicken Bacon Ranch con su aliño, por ejemplo, tiene más calorías (661), grasa (51gr.) y sal (1,260mg.). Si no os queda más remedio, como a mí, pedid aceite y vinagre.
Productos “Fat free” o “0% grasa”.
Cuidado con estos alimentos. Pueden ser incluso peores que su versión normal. Al quitar la grasa también desaparece gran parte del sabor original, por lo que los fabricantes tienen que agregar azúcar y toda clase de químicos para transformar lo que queda en algo comestible. Y estos productos tan de moda tampoco adelgazan y mucho menos si se toman como si fueran bombas incinera-calorías.
Cereales para el desayuno o en barritas.
Muchos consideran los cereales como desayunos para niños, pero están recomendados para todas las edades, en especial para personas que sufren un gran desgaste físico. Contienen hidratos de carbono, vitaminas y minerales.
Aunque no todos son recomendables para una alimentación sana. Tened cuidado con los que agregan miel, chocolate y frutas. Incrementan su valor nutritivo, sí, pero la cantidad de calorías se dispara. Lo mismo vale para las barritas. Algunas pueden tener el doble de azúcar que una golosina. Leed la información nutricional y comparad, antes de comprar.
Alimentos “Quemagrasas”.
Piña, papaya, apio, siropes varios o sopa de repollo transgénico. La lista es tan larga como la de las ridículas dietas milagro. Lo siento, pero no existe ningún alimento que queme grasas. Como mucho, ayudan a digerir mejor los alimentos. Algunos, como el chocolate y los refrescos de cola, pueden acelerar levemente el metabolismo durante un rato, pero no compensan las calorías ingeridas, por lo que tampoco harán que perdáis peso. Tonificación muscular seguida de cardio y una dieta equilibrada: Esto sí que obra milagros.
El aguacate.
Es verdad que posee un elevado aporte calórico: 193 calorías por cada 100 gramos, pero dadas sus cualidades, es recomendable su ingesta en pequeñas cantidades. De origen mejicano, los antiguos aztecas lo llamaban “mantequilla de los bosques”.
Muy sabroso y energético. Contiene 14 minerales y es rico en vitamina E, un antioxidante que retrasa los procesos de envejecimiento y previene el cáncer. Contiene ácidos grasos esenciales y proteínas de alta calidad que se digieren fácilmente, sin contribuir negativamente en el colesterol. Es indicado para diabéticos por su baja proporción de hidratos y su capacidad para equilibrar el azúcar en la sangre.
Así que recordad: Antes de abrir la boca, ¡abrid los ojos!
http://www.sohofitnessclub.com
lunes, 21 de marzo de 2011
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